Era mi convicción que mi “roster” de amigas estaba completo por el resto de las temporadas de béisbol que le quedan a mi vida. La ecléctica novena que orgánicamente había confeccionado estaba completa. Más bien era un “roster” extendido: las amigas de la escuela, las de natación, las del vecindario, de la universidad, de trabajo. Entonces estruendosamente se mudó a mi vecindario, Miriam, una rubia diminuta.
Los vecinos, en especial yo, padecimos interminables y perturbadores meses de construcción en la que sería su nueva casa. Ya empachada y sugestionada por ese caos, mi saludo mañanero era : “¡Coñoooooo esa gente esta haciendo un túnel de acceso directo hasta la playa!”
Los “honeymooners” se mudaron unas cuantas casas más abajo de la nuestra. Para mi asombro (y desilusión) no había túnel pero el bendito townhome simplemente quedó precioso. De primera impresión me pareció que la bayamonense era alguien que NADA tenía en común conmigo. Afortunadamente el otro miembro de “Los honeymooners” es amante del béisbol y bastante masoquista por ser fanático de los Mets de Nueva York. Así que cuando descubrió a mi esposo, encontró finalmente con quien debatir, ahogar sus penas y desilusiones durante cada infinita temporada de béisbol. Así gracias a ese “hit La Gloria zapatos-medias” , como decía en la radio sobre los Indios de Mayaguez, nuestra amistad llegó a primera base.
En el año 2005 nuestra amistad llegó a la segunda base. Yo como la embarazada más aborrecida y “jalta” (harta) de odio y ella como la madre primeriza “más linda que había visto”. Al menos esa fue la muy acertada descripción que la vecina repetía cada vez que la veía, desafortunadamente yo andaba con ella la mayoría de las veces que ocurría. Todas las veces, Mima me miraba con complicidad y discretamente me apretaba la mano. Como distintas caras de la moneda, mientras yo me maté poniéndome gorda, experimentando TODOS y cada uno de los efectos secundarios del embarazo, ella era el antonimo de mi experiencia. “La Súper Mima” y su barriguita de primeriza, continuó su vida, su negocio, decoró para la navidad y anidó su hogar como si no estuviera acunando una nueva vida. Para complacerme (o más bien para aplacarme ), mi flemática amiga y toda su familia se dieron a la tarea de conseguirme TODAS las luces rosadas de navidad disponibles en el área metropolitana. Creo que entre ella y yo fuimos las pioneras de esa nueva tendencia de anunciar el sexo del bebé de una manera especial. Nada dice “es una niña” como una casa decorada en su totalidad con luces rosadas. ¡Desde un avión se veía nuestra casa rosada! Su primogénito y mi benjamina nacieron con 3 días de diferencia. Es imposible celebrar el cumpleaños de uno sin recordar a la otra.
De la misma manera tuve el honor de presenciar cuando, entre fajitas y tacos, nerviosamente anunció que iba a repetir su récord personal de ser la preña’ más linda y feliz del mundo. “Muslito Squish” nació en agosto para completar el dúo de hermanos que cariñosamente he bautizado como los hermanos #SelfService. Este acrónimo es un chiste bien interno que hago con la única intención de hacer reír a mi amiga y mortificar a su prole.
En época de Navidad nuestro vecindario se perfumaba con olor a canela. No había aire salado, ni brisa del mar que pudiera oponérsele al olor de sus muy famosas bolas, las “almond butterballs”. Extra oficialmente cada época festiva era anunciada por el irresistible aroma a bizcocho de canela o a entrelazado de queso y guayaba recién horneado por sus artesanales manos.

Así descubrí que la talentosa zurda era una consumada pastelera, negociante, con una habilidad inigualable para hacer canastas y lazos. A “La Mimation” le encantan las fiestas y no hay que preguntarle dos veces para organizar, planear y montar fiestas de cumpleaños, de Halloween o de Navidad. Tampoco hay nadie más original para hacer regalos hechos a mano en San Valentín, Pascua o Halloween. Entre todos esos inventos y embelecos me ayudó a despertar y desarrollar mi lado creativo. Enseñándome desde cómo decorar árboles de navidad (no importa si son duendes, monster high o princesas) hasta como hacer lazos lindos de cinta. Aunque siempre se burla de mi, ella sabe muy bien que es la responsable de mi vicio de comprar cintas de satin en Costco. Así entre inventos, fiestas y otros embelecos, nuestra amistad avanzó a la tercera base.

Lo que cerró nuestra amistad fue el año en que eligió disfrazarse como como mi primogénita. Mi hija en edad casi pre-escolar estaba buscando sentido de pertenencia a su nuevo entorno educativo. En esa edad ella siempre llevaba dos colitas azabache bien largas y rizas. Entonces en ese Día de Brujas, por amor a mi hija, y sin encomendarse a nadie se cubrió tu cabello rubio con “spray” negro, se hizo dos colitas y se puso dos postizos largos y rizos. La cara de sorpresa y alegría de mi hija lleno mi Corazon y llevó nuestra amistad hasta el home.
Estos son algunos de los momentos en que Mima ha marcado mi vida. Pero no son los únicos. En nuestros años de amistad hay muchos momentos y memorias atesoradas en el disco duro de mi corazón. Luego de muchos años de ausencia, La Mima me recordó y devolvió la alegría de mis años universitarios donde pase todos esos recesos primaverales en la is islita de Culebra. Aunque agradecidamente, ya no me bañé en el mar con jabón de fregar, ni acampé en la playa de Flamenco.
Como miembro fundadora del #TeamLasDuras, aún desde la distancia, La Mima me acompañó cada día de la pandemia. De lunes a viernes y en el #HoyEsDiaDeJuego (sábado) juntas nos pusimos en tremenda condición física, meditamos y hasta nos dimos faciales via “zoom”.

Tengo que alardear que soy custodia de uno de sus “trade secret”. La Mima, bajo secreto de confesión, me enseñó una de sus recetas famosas y hasta me regaló una batidora ”KitchenAid”. Cabe mencionar que no se si es porque confía en mi o es que ya estába hasta la coronilla por mis pedidos de tamaños y colores especiales de último minuto que requieren envíos FedEx a Miami. Me jodí porque ahora tengo la receta, la batidora…llena de polvo y las benditas bolas no me saben tan buenas. Aunque la receta está correcta probablemente le falta todo el amor y las buenas intenciones que solo Mima con su delicado toque puede transmitir.
Como lo que es obvio no se pregunta no hace falta abundar sobre lo excelente que la ex Primera Dama Culebrense es como madre, esposa, nuera, hija, hermana o que es la mejor “Titi” del mundo. O con el inmenso amor e infinita compasión con que cuidó de su suegra.
Aunque finalmente ha aprendido a decir “ No, gracias”, “La Mima” no es adversativa, ni te contradice. Con amor y con la suavidad del temperamento que la caracteriza te brinda su apoyo incondicional y te dice la verdad a tiempo, sin juzgar, sin reproches. Así lo ha hecho durante tantos momentos de alegría, crisis de salud, crisis económicas, crisis familiares y en momentos trascendentales para mi. Es mi anhelo seguir aprendiendo de ella, poder celebrar y reciprocar cada bendición que su amistad me brinda.
La realidad es que en Mi Por 100pre Cambiante Vida mi amiga Mima no construyó un túnel con acceso a la playa, sino uno directo a mi corazon para ella y para todos los suyos. Eso es un cuadrangular con las bases llenas.
¡Feliz Cumpleaños 50ta Mima!
